Vitaminas D3 y K2

El cuerpo humano requiere varios nutrientes y vitaminas que son esenciales para su salud. Por lo tanto, vale la pena centrarse en una dieta equilibrada. Solo cuando es difícil asegurar la cantidad correcta de cualquier ingrediente, se debe usar un suplemento. Las vitaminas K2 y D3 son compuestos químicos importantes que tienen un efecto positivo sobre el sistema óseo y los vasos sanguíneos, entre otras cosas. Ambos son liposolubles, lo que significa que el cuerpo no puede acumularlos ni almacenarlos. Además, deben tomarse juntos, porque la D3 ayuda a absorber el calcio, mientras que la K2 se encarga de la correcta colocación de este microelemento en el sistema óseo, al mismo tiempo que previene los depósitos nocivos en las articulaciones y arterias.

Efecto y aparición de la vitamina D3

La vitamina D3 es producida por el cuerpo humano cuando la piel se expone a la cantidad adecuada de luz solar. Esto significa que en los meses de otoño e invierno, cuando el clima fuera de las ventanas suele estar nublado y desfavorable, el cuerpo está más expuesto a la falta de este compuesto orgánico. Se encuentra en aceite de pescado, huevos, productos lácteos, aceites de pescado y vegetales, entre otras cosas. Muchas personas tienen problemas con la deficiencia de vitamina D3, por lo que también vale la pena considerar la suplementación.

La dosis adecuada de vitamina D3 tiene un efecto positivo sobre el sistema óseo, así como sobre los vasos sanguíneos, el sistema digestivo y el bienestar general. Esto se debe en parte a sus propiedades, que promueven la absorción y utilización de calcio y fósforo. También regenera los sistemas nervioso y muscular. D3 también regula la respuesta del cuerpo a diversas infecciones y, por lo tanto, tiene un efecto significativo en el sistema inmunológico. Debido a los muchos efectos beneficiosos, vale la pena prestar atención a la dosis correcta de esta vitamina a cualquier edad.

La vitamina K2 y su influencia en el cuerpo humano

La cantidad correcta de vitamina K2 en el cuerpo asegura el desarrollo saludable del sistema óseo, incluidos los huesos y los dientes, también regula la correcta coagulación de la sangre y protege el sistema cardiovascular. Además, mejora el tono de la piel y tiene propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y analgésicas. También es responsable del correcto metabolismo del calcio y activa la osteocalcina, una proteína encargada de fijar el calcio en los huesos.

La vitamina K2 es producida por las bacterias intestinales, pero no se absorbe en el cuerpo desde allí. Se encuentra de forma natural en la carne, los huevos y los productos lácteos, pero las mayores cantidades se encuentran en el plato asiático del natto, elaborado con soja fermentada, cuyo sabor y olor característicos pueden no gustar a muchas personas.

Suplementación de vitaminas K2 y D3

Tanto la vitamina D3 como la K2 son necesarias para la correcta absorción del calcio para que tenga un efecto positivo en el sistema óseo. D3 ayuda a absorber este químico mientras que K2 lo dirige a donde se necesita, es decir, el esqueleto. Por lo tanto, es importante proporcionar al cuerpo la dosis correcta todos los días. Los suplementos dietéticos que contienen estas dos vitaminas están disponibles tanto en tabletas como en forma líquida y eliminan sus deficiencias, que a menudo son difíciles de reponer con alimentos.